Educación del oído: trabajo melódico, trabajo armónico, trabajo tímbrico, trabajo estructural.
Educación rítmica: práctica de la pulsación marcada con un gesto corto i preciso. Las figuras serán representadas mediante la improvisación y el trabajo sensorial.
Lectura de notas.
Improvisación melódica: improvisación libre, con construcción de frases suspensivas y conclusivas. Combinación de los diferentes sonidos estudiados.
Improvisación rítmica: improvisación libre con o sin concreción de un número determinado de pulsaciones. Invención de frases de 4 ó 8 pulsaciones utilizando distintas fórmulas rítmicas establecidas.
Composición: creación de pequeños fragmentos musicales con todos los elementos conocidos. Es muy importante que los alumnos sepan cantar sus propias composiciones.
Educación de la voz: vigilando la posición, la respiración y la articulación individual, buscando un sonido nítido, equilibrado y musical en el conjunto del grupo de clase.
Canto coral.
Audición: se conocen las obras fundamentales de la literatura musical. Como elemento de descubrimiento práctico del lenguaje, se utiliza en la lectura, los dictados y el análisis.
Lectura musical: lectura rítmica, afinación, análisis e interpretación de memoria.
Memoria: desarrollada desde el análisis, como soporte para la interpretación.
Transporte.
El espacio de juego: pretende desvelar la curiosidad, el entretenimienyo y la participación individual y en grupo.